Crear una ciudad ideal era el reto. La planeamos, proyectamos y la construimos no sólo con nuestros compañeros sino también con alumnos de otra clase a los que no conocíamos. En el colegio no tenemos la posibilidad de trabajar ayudándonos y colaborando en grupos muy habitualmente y es algo muy valioso para el futuro.
Nos comunicamos a través de cartas, notas y mensajes de vídeo, realizamos una lluvia de ideas con diez elementos que queríamos incluir en la ciudad y a través de un vídeo los de la otra clase opinaban sobre nuestras ideas y nos dieron diez nuevas que nosotros también valoramos.
Teníamos muchas ideas y poco tiempo, sólo 20 minutos por clase, un mes, y trabajamos en parejas, cortando, construyendo y por supuesto hablando inglés! Miramos al principio de la clase si había cambios, mejoras o si nos habian dejado notas o vídeos los de la otra clase. Fue divertido y emocionante!
Es una actividad muy útil para hablar inglés libremente y sin correcciones, lo que no
s da confianza y práctica, nos concentramos en comunicarnos con rapidez, sin preocuparnos de pequeños fallos gramaticales, haciendo que el inglés fluya de manera natural.